TARTA SELVA NEGRA EN VERSIÓN MINI

Después de un montón de días desaparecida aunque no parada, vuelvo con una receta muy interesante y perfecta para los próximos días en los que las cerezas irán bajando de precio hasta llegar a unos límites razonables, ahora todavía están por las nubes y yo he utilizado para hacerlas unas cerezas confitadas pero cuando las hemos probado con las cerezas frescas la verdad es que están mucho más ricas, también se pueden hacer con frambuesas o fresas pequeñas.

Esta receta la he sacado del libro Repostería de Felder, si te interesa esta parte de la cocina, este libro es un imprescindible, a mi me lo ha prestado mi amiga Mamen y no se si voy a devolverselo en una buena temporada. jajajaja

INGREDIENTES

Para las sables:
       125 grs. de mantequilla a temperatura ambiente
        45 grs. de azúcar glass
          1 gr. de sal
       115 grs. de harina
        10 grs, de cacao en polvo tipo Valor sin azúcar
Para la crema inglesa
        120 ml. de leche entera
         10 grs. de azúcar blanco
           1 yema de huevo
 Además
         225 grs. de nata montada
         275 grs. de chocolate con leche
         150 grs. de cerezas

ELABORACIÓN

Sables:
       Mezcla la mantequilla con el azúcar glas y la sal con las varillas hasta que quede perfectamente integrado. Añade la harina mezclada con el cacao y sigue removiendo con energía hasta obtener una masa consistente.
       Extiende la masa entre dos hojas de papel de horno y con el rodillo debes dejarla con un grosor de 3 mm. Pon la masa en el congelador durante unos 15 minutos.
Quita el papel del horno y enharina ligeramente por ambas caras.
Corta con un corta pastas de unos 6 cm. de diametro y mantenlas en la nevera hasta que el horno esté a 180º. Una vez haya llegado a la temperatura indicada meter las sablés durante unos 10 minutos.
Cuando las saques estarán un poco blanditas pero en seguida se pondrán crujientes y extremadamente frágiles. Déjalas enfriar en una rejilla y después a una lata hermética hasta su uso.

Espuma de chocolate:
       Templa la leche. Mezcla con unas varillas el azúcar con la yema hasta que blanquee, no merece la pena hacerlo con las eléctricas, se puede hacer a mano perfectamente. Una vez que lo tengas añade la leche templada sin dejar de remover.
Pon en un cazo a fuego lento sin dejar de remover y si tienes termómetro déjalo hasta los 82º si no espera a que empiece a esperar, justo en ese momento apártalo del fuego. Deja enfriar hasta los 50º y mientras derrite el chocolate bien al baño maría bien en el microondas.
Una vez haya enfriado la crema inglesa echala sobre el chocolate y remueve hasta que quede integrado. Incorpora la nata en dos veces con movimientos envolventes hasta que quede completamente mezclada, quedará una mezcla color café con leche y bastante espumosa.
Tapa con un film transparente y lleva a la nevera de un par de horas hasta toda la noche, cuanto más reposo más fácil será ponerla sobre las tartaletas.
Con la manga pastelera rellena los sables en tres montones, añade las cerezas entre medias y pon un poco por encima para sujetar la tapa de arriba.
Se puede coronar con un poco más de crema encima de la sablé y una cereza.

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